20 nov 2012

Auras

Micro-relato que escribí para un concurso de http://www.espadaybrujeria.com

"Algunos lo llamarían don, otros una maldición. Mis padres se inclinaron por la esquizofrenia. No les culpo. Ni yo mismo estoy seguro de cómo lo llamaría.

Una pareja joven pasa delante de mí, mientras un hombre de negocios los observa desde el semáforo. Su aura se revuelve con remolinos de un amarillento bilioso. Es envidia. Lo que no sabe es que la pareja acaba de discutir y probablemente no durarán mucho tiempo juntos. Sus auras están rojizas de ira, con tintes anaranjados de culpabilidad.

Yo no pedí este poder.

Un balón golpea mi pie. Un chiquillo de apenas doce años corre a recogerla y me dirige una fugaz disculpa antes de salir corriendo hacia el parque. Alrededor de él revolotea un aura pura, blanca y azul. Es como un soplo de aire fresco en medio de la polución.

Tal vez sea un buen día.

Por casualidad mi vista se para en un hombre que observa a los niños con una sonrisa disimulada. Una burbujeante masa negra se retuerce en su aura alrededor de su cintura.

No, no va a ser un buen día. Hoy me toca trabajar."

12 nov 2012

Prólogo

"El joven tecleaba frenéticamente, soltando maldiciones cada cierto tiempo. La luz del monitor daba un aspecto fantasmagórico a su rostro concentrado. Una gota de sudor le recorrió la frente, bajando lentamente hasta quedar suspendida bajo la ceja fruncida. Un segundo tardó en desprenderse y caer en el ojo del informático.

—¡GRAAAAAAARGH!—gritó mientras daba vueltas en la silla de oficina.—¡Maldito wordpress!

Con un último y agónico grito cayó al suelo, volcando la silla y arrastrando el cable del portátil hasta tirarlo de la mesa.

Frente al cuerpo inconsciente, la pantalla rajada mostraba: Actualizaciones 7"

Esta es la historia de cómo terminé con mi anterior blog NarraN, cansado de que cada actualización me desmontara el tema y pelearme más con la programación del blog que con las entradas.

Así es como empieza este nuevo blog, que espero me sirva de mejor manera. 

Un saludo.

Blackdere